jueves, 5 de febrero de 2009

DE LOS GOYAS 2009: EL BUEN CAMINO

La más laureada película española, “Camino” me pareció magnífica aquel domingo de diciembre por la mañana cuando la vi en la zona norte de Madrid, recién estrenada. Había muy poca gente a las 11. Antes de iniciarse la proyección, Rosa Jiménez Cano que me había acompañado, y yo, pudimos ver la entrada de un padre con dos niños de no más de 10 años. Creo recordar que eran chico y chica.Comenté con mi colega  que el hombre debía de haber confundido la palabra “camino” con alguna película de Walt Disney y que, cuando se apercibiese de su error, llevaría a sus hijos a ver otra cosa o a un McDonalds. Nos equivocamos. Salieron al final, probablemente tan angustiados como el puñado de adultos que estábamos en la sala.

La película es dura, durísima. Muestra una repugnante manipulación de las mentes por parte de unos profesionales del miedo eterno. El Opus Dei aparece en esta película como una secta peligrosa que aprovecha la religiosidad exacerbada de una familia pre-conciliar para convencerla de que su hija, es una santa.  La niña padece una enfermedad incurable que la obliga a seguir dolorosos tratamientos en el Hospital de Navarra, perteneciente al Opus Dei. La dialéctica manejada por los miembros de la orden fundada por Monseñor Escrivá de Balaguer, es una esgrima enrevesada en la que se aprecia, como espectador, el diabólico encajonamiento de las mentes en una filosofía perversaque sitúa al ser humano en un valle de lágrimas para mayor gloria de su Creador. Nunca pude entender a ese “Supremo Arquitecto” que puede exigir el sufrimiento de un inocente, como es el caso de esta niña, para mayor gloria de la divinidad. Retrasar la felicidad para después de la muerte es condenar la vida a ser un continuo “camino” iniciático  hacia una problemática eternidad.

Sinopsis de Camino

Pamplona, junio de 2001. Camino, una preciosa y dulce niña de once años, vive sus últimos momentos en la habitación de un hospital. Rodeada de familiares, amigos, sacerdotes y un número inusitado de personal clínico, da a todos un casi sobrenatural ejemplo de muerte serena y feliz. En una atmósfera de santidad y cuando parece que la muerte es ya inevitable, ocurre algo extraordinario en la habitación. Inspirada en hechos reales, CAMINO es una aventura emocional en torno a una extraordinaria niña de once años que se enfrenta al mismo tiempo a dos acontecimientos que son completamente nuevos para ella: enamorarse y morir. CAMINO es, sobre todo, una luz brillante capaz de atravesar todas y cada una de las tenebrosas puertas que se van cerrando ante ella y que pretenden inútilmente sumir en la oscuridad su deseo de vivir, amar y sentirse definitivamente feliz.

No hay comentarios: