lunes, 16 de junio de 2008

ODA A MI GENERACIÓN: Alexis Triana y Fidel

Este suceso que abajo se narra, fue uno de los momentos de mayor optimismo en la Universidad de la Habana, quinquenio 83-88.
Todos pensamos que la suerte estaba echada y que el protagonismo nos había llegado por fin de nuestras propias manos.
Que pasó? No lo sé.
Mientras, cuelgo la historia de la reunión de periodismo contada por los Miquis de Miami y rectificada por Jorge Fernández Era, un protagonista de la misma que ese sí, vive en la Habana, Cuba.
Quiere decir, que no está dicha la última palabra: Si alguien tiene otra versión acá lo espero.

Así empezó su intervención el estudiante de cuarto año Alexis Triana frente a Fidel Castro, con quien se reunían, el 26 de octubre de 1987, los alumnos y profesores de la Facultad de Periodismo de la Universidad de La Habana. También estaba el posteriormente defenestrado Carlos Aldana en aquella sala del Palacio de la Revolución.
El encuentro había sido solicitado en más de una ocasión por los estudiantes y docentes, a partir de todo el hervidero de ideas que la perestroika gorbachoviana había generado en Cuba.
Muchos de los que asistimos pensábamos, ingenuamente, en respuestas a lo que la “glasnot soviética” sacaba a la luz y nosotros leíamos ávidamente en las después censuradas publicaciones “Novedades de Moscú” y “Sputnik”. Queríamos saber por qué estábamos redescubriendo en aquellos escritos lo que pasaba en Cuba. Sin embargo, aquel encuentro terminó con un “solo de boca” de Castro, desmintiendo y justificando todo lo que de forma sincera habían expresado abiertamente los estudiantes, teniendo en cuenta el lugar de reunión, el contexto nacional y mundial, y la tensión por los cuestionamientos de los asistentes al gobierno.

¿Dónde están hoy algunos de los principales protagonistas de aquel día?













Alexis Triana: No sabemos si dijo aquello porque lo sentía, o porque trató de calmar el ambiente o, sencillamente, porque fue su manera oportunista de abrir el diálogo. Intentó explicar su idea de las manifestaciones del culto a la personalidad de Castro dentro de Cuba, pero el “Monólogo en Jefe” no lo dejó. Fue el último que habló antes de la perorata de aquel, que puso fin al encuentro en la madrugada.
Triana vive y trabaja en Holguín, a donde fue a cumplir el servicio social por solicitud propia, según los profesores que estuvieron en la reunión de ubicación laboral. Es el Director Provincial de Cultura y fue directivo de la Asociación Hermanos Saíz.

Iván El Terrible: Su intervención giró también sobre el culto a la personalidad de Castro. Trató de ejemplificar con algo que dijo haber leído en la prensa cubana: que Castro había regalado un central azucarero a un país latinoamericano. Esto generó una especie de controversia y una incisiva sesión interrogadora de Castro sobre lo que él estaba diciendo. El dictador mandó a buscar la publicación y la mostró satisfecho: “Dona Cuba un central azucarero…” Iván no pudo hablar más. No sabemos por dónde anda, pero ojalá que le vaya bien, porque era una gran persona.

Jorge Fernández Era: Era un tipo mordaz y talentoso. Habló de los planes de construcción que nunca acababan y de la locura castrista del médico de la familia. Nunca terminó la carrera; al menos con nosotros. Formó parte del grupo humorístico Nos Y Otros. Creemos que sigue en Cuba, pero no sabemos qué está haciendo. Aquí lo pueden ver en una presentación de Nos Y Otros en el 96. Es el primero que sale en la obra.

¿Dónde están algunos de los principales protagonistas del día después?
Al día siguiente del encuentro, el ala radical de la juventud comunista y de la FEU promovieron todo un movimiento contra las expresiones “diversionistas” y cuestionamientos a Castro y su sistema. A la cabeza estuvieron:

Lidia Señarís: Como secretaria general de la UJC fue propulsora de la cortadera de cabezas y de las reuniones de análisis en todas las aulas. Era una de las “comecandelas” de la Facultad. Luego de graduarse trabajó en Prensa Latina. Fue a España…y se quedó. Así es la vida.












Rosa Miriam Elizalde: Otra “comecandela”, compañera inseparable de Señarís en el movimiento de “reafirmación revolucionaria”. Llegó a ser subdirectora de Juventud Rebelde. Su carrera ha sido meteórica por los entresijos del poder cubano: hoy es la periodista del Consejo de Estado, co-autora con Luis Báez de libros como “Los disidentes” y “Chávez nuestro”. Se casó con José Pertierra, el abogado americano que representa al gobierno chavista.





Rolando Segura: Este incipiente “talibán rojo” pidió también sangre en aquel momento de verdaderas confusiones. Era dirigente de la juventud, se graduó e inició la carrera de reportero de la televisión cubana. Hoy es diputado a la Asamblea Nacional, corresponsal de Telesur en Cuba y de la Mesa Redonda, profesor de la Facultad de Comunicación Social, y viajante continuo a México a impartir cursos. El oportunismo lleva su nombre, para no hablar de otras cosas más cercanas al perfil ocupacional de Mariela Castro.

¿Cómo terminó esta historia?

Sencillo: lo que había comenzado como un proyecto para recabar respuestas a las inquietudes de los estudiantes sobre lo que pasaba en la sociedad cubana y en el entonces bloque comunista europeo, finalizó con más dudas que nunca, gracias a las "Mesas Redondas Instructivas" que cual "Brindis por el Sonso", impartió Aldana a cada uno de los cursos de la Facultad.
Uno de los participantes en ese encuentro, el entonces profesor Wilfredo Cancio, también revivió ese hecho.

1 comentario:

Anónimo dijo...

BIen bueno este articulo Iddia. Se me pusieron los pelos de punta al acordarme de este episodio en nuestra vida de estudiante.Y recuerdas la fiesta de graduacion de Alexis Triana meses mas tarde?
Que circo? o fue a proposito? o era cierto y luego no hubo valor? La castracion mental es una nueva forma de violencia aqui... Piensas y ya no existes....Gracias por escribir sobre esto!