miércoles, 28 de mayo de 2008

El hombre nuevo y el cubano global: palabras cruzadas con Iddia Veitía Gómez.

Originalmente para la revista Correo. Entrevista Mauricio Zans

El Che Guevara, ese guerrillero argentino/ cubano elevado a la categoría de icono pop gracias a la constante presencia de su imagen en campañas publicitarias, prendas de vestir, decoración epidérmica, posters y filmes periféricos y centrales elaboro al calor de la triunfante revolución cubana de 1959 la teoría del hombre nuevo. Un hombre – también una mujer – que por su compromiso con las ideas transformadoras del socialismo, su conciencia y su praxis estaría llamado a construir un nuevo mundo.

Un mundo de solidaridad, igualdad, altruismo. Un ser humano capaz de llevar los ideales de la modernidad hasta sus últimos limites.

Casi medio siglo ha transcurrido desde entonces. El Che Guevara cayó en Bolivia, el mundo de hoy es un escenario mucho mas injusto y cruel y el retorno del espíritu “sesentero” no se atisba mas allá de las modas y los reciclajes al uso. Los cubanos y cubanas formados bajo aquella máxima guevariana del hombre nuevo construyen hoy sus vidas en paisajes tan diversos como Madrid o New York, Berlín o Miami, la Habana o Buenos Aires.

La educación revolucionaria, los valores sobre los que esta se asienta pesan sobre ellos marcándoles, dando forma a sus conductas y distinguiéndoles del resto de los exilios.

Iddia Veitía Gómez, la Habana 1965 es una de esos cubanos/ cubanas que con un pie en su ciudad de adopción y la mente puesta en Cuba busca respuestas y formula preguntas que le llevan a nuevas encrucijadas. Cruces de camino en los que lo mas importante son asuntos tales como la identidad y la cubanía temas centrales de su proyecto de documental “El Socialismo y el Hombre en Cuba: 45 años después” obra finalista en el certamen DOC TV IBEROAMERICA 2006.

Correo - Tu eres hija de cineastas y ahora a la vuelta de muchas historias – estudios de filosofía en la Universidad de la Habana, estadías en Avignon, trabajos diversos en radio, como investigadora, nuevos estudios, la maternidad como experiencia y misterio – te asientas en Ciudad México donde trabajas en como analista en una empresa de estudios de Mercado y Opinión Publica; Heurística. ¿Cómo ha influido en Iddia Veitía Gómez su entorno, su familia, su contacto con los sets y las salas de montaje y el cine cubano en esta deriva hacia el cine y en especial hacia el documental?

Tuve primero con el cine una relación de mucho rechazo, luego me convertí en una cinéfila adicta al cine francés y he terminado tratando de querer hacerlo. El cine, el cine como documento, como obra contingente es el cine en el que crecí. Yo soy hija de una generación de gente que tubo la dicha de vivir al menos por un tiempo dentro del sueño que imagino. Una generación que imprimió una huella muy profunda dentro de la historia de este país y del mundo.

No había otra manera de narrar lo que acontecía entonces que no fuera la contingencia. Alguien dijo que los sesenta cubanos están rodados con cámara en mano. Comparto esa opinión. Hasta nuestras más radicales ficciones llevan ese sabor a “verité”. . .luego, con el tiempo descubres el cine como un juego, como un juguete, un puzzle para armar. Soy cien por cien conciente de la importancia de mis padres Sara y Héctor con quien comparto la autoría de este proyecto. El Socialismo y el Hombre Nuevo. . . es algo natural, algo que tenia que suceder inevitablemente. Pude proponerme un grupo de textos, un ciclo de conferencias, pude haber elegido cualquier tipo de soportes incluidos Internet, la radio.

Elegí el documental por su fuerza, por su carácter testimonial, por ser esa suerte de cenicienta que cuando en las grandes fiestas del cine se desata el oropel en forma de champagne y vestidos de Prada se tiene que marchar. También por ser este el medio en el que se han verificado algunas de nuestras más significativas obras cinematográficas. De forma muy modesta, con muchísimo respeto y admiración, y casi a tientas, también quise sumergirme en esa tradición a la vez que espíritu visionario de nuestro documental.

Correo - ¿Por que el hombre nuevo como tema central de este tu primer trabajo documental?

Te aclaro que yo no siento que con esta propuesta me estoy profesionalizando dentro del cine. El cine es una profesión que requiere de mucho oficio y talento. Personalmente siento y quiero documentar visualmente un punto de vista que comparto con un grupo personas. Posiblemente este sea mi primer y ultimo trabajo documental, pero me gustaría mucho hacerlo porque es una obra colectiva en donde mi numerosa, extensa y recompuesta familia esta activamente participando. Es sobre todo un homenaje que le debo al cine documental cubano, en donde crecí, como pudo crecer otro niño robando golosinas en la bodega de sus padres.

Por otro lado, aunque no sea conciente en nosotros, estemos donde estemos, en Cuba, en el Polo o en Júpiter que debe ser un planeta muy interesante de conocer somos ese ser humano que imagino el Che Guevara. Hoy nuestros cuerpos andan dispersos por toda esa geografía de ciudades, idiosincrasias, lenguas y acentos que es el mundo y en medio de todo esto nuestra ideología sigue siendo el lugar desde el que evaluamos tanto los avances como los retrocesos que el devenir nos impone, desde nuestra ideología concebimos el mundo. No imagino ningún tipo de bosquejo sobre el cubano de hoy sin tomar en cuenta el componente ideológico. Es algo que esta oculto a la vista pero que de alguna manera es nuestro imán, nuestro centro. Es por así decirlo una forma de religiosidad. Un soplo subjetivo y fundamental de nuestro ser, como lo son la racialidad y el mar.

Correo – La identidad, esa necesidad de identificarte/ identificarnos como algo especifico sin dejar de participar de ese fenómeno aglutinador que es lo global es una idea constante en tus reflexiones. ¿Por qué?

Yo soy hija, producto de esa vocación totalizadora, mi madre Sara era una mujer negra, mi padre es un hombre blanco. Estoy, estamos hechos de fragmentos y esos fragmentos son nuestra identidad. A mi no me interesa una identidad reduccionista, ensimismada. A mi me interesa la identidad como un proceso de suma de partes. El concepto del hombre nuevo y el intento por nosotros y nosotras de su praxis es un salto magnifico en nuestra evolución como pueblo, como nación. Una nueva manera de ser cubanos. Somos seres globales inmersos en los mismos procesos que la gente en Estocolmo o Guayaquil. El mar como lugar de encuentros y despedidas nos ha marcado mucho, hoy de alguna manera nos hemos reconciliado con esta nuestra frontera natural y esto rediseña nuestra identidad. Algún día alguien tendrá que escribir de cómo el mar Caribe ha definido lo que somos. Nuestra insularidad no es la misma que la del Mediterráneo.

En este mundo de hoy al que los cubanos hemos salido a vivir, amar, trabajar y dar forma a nuestros destinos nuestra ideología funciona como una suerte de pasaporte social. Esa simetría permite que nuestro impacto tanto hacia dentro como hacia fuera sea mayor digamos que hace 20 anos atrás. En esto también tiene mucha importancia la forma en que ha evolucionado nuestro país, la forma en que se ha vuelto mas hacia su entorno haciéndose mas atractivo a la vez que universal. Ser cubano es una responsabilidad, saber que somos los verdaderos dueños de nuestro país nos obliga y compromete.

Como investigadora como persona interesada en entender los resortes más íntimos de nuestro ser, siento una responsabilidad muy grande. El hombre y la nueva mujer son gente como uno, gente común que tiene necesidades y quiere ser feliz. El altruismo, la solidaridad y la justicia como medida última de todas los cosas, son junto al género, la orientación sexual y el sitio en que se nace trazas de nuestra identidad. Explorarnos en ese sentido es una obligación esa es la esencia de este mi primer trabajo documental, una obra aun inacabada pero sobre la que tengo las cosas muy claras.

Correo - ¿Entonces asumes que esta exploración tuya de los cubanos y cubanas post-revolucionarios es importante para el futuro? ¿Qué este bosquejo dará como resultado una suerte de mapa con el que poder orientarse las generaciones venideras al sentirse interesadas por este tema?

Yo no pretendo que esta necesidad mía de responderme algunas preguntas se convierta en la bitácora con la que acercarse a ciertos asuntos, yo solo tenia preguntas y sentí que el medio mas adecuado con que ir en busca de las respuestas podía ser el documental. Nada más. Yo soy una mujer pequeña y sencilla que busca calma, que quiere estar en paz consigo misma.

Correo - ¿Cómo ve Iddia Veitía Gómez el futuro?

Soy optimista. Una optimista que conoce, que maneja los datos, que coteja la información, que investiga. Mi optimismo no es el optimismo patético de los profetas y pagadores de promesas. Tenemos como pueblo unas reservas sociales inmensas y aunque en ocasiones nos sintamos cercados por las necesidades y sus circunstancias tenemos bien claro que cosas son las que ponemos en la balanza. Retomando un poco el sentido de la pregunta anterior quiero introducir una idea con la que explicar lo que digo: Cuando yo me fui metiendo de a poco en la concepción del “El Socialismo. . . ” Si, tenia una pretensión y debo reconocerlo. Tenia la pretensión de exponer las razones por las cuales creo y siento que nuestro proyecto social debe continuar y vivir fuera de Cuba no podía descalificarme para ello.

Nuestra espiritualidad – no se si ya lo he dicho antes – esta muy ligada a la ideología y nuestra ideología es praxis. Pensar a Cuba, su futuro, sin pensar en la perfección de todo cuanto se ha hecho, sin diseñar el porvenir desde la continuidad, sin entender cada momento como un puente seria un error garrafal. Avignon y el D.F.Mexicano son ciudades hermosas pero también son ciudades en las que he conocido la falta de solidaridad entre las personas, ciudades donde he visto la marginación, la pobreza extrema, la corrupción, la prostitución infantil y ser cubana no es otra cosa que ante esas realidades no poder volver la vista hacia otra parte y hacer como si no pasara nada. De igual manera que hasta hoy no ha existido socialismo sin austeridad, no existe el capitalismo con rostro humano. Soy optimista. Tengo la certeza que sabremos y podremos alzarnos por sobre todas las dificultades y construir un espacio acogedor y sostenible en el que vivir nuestras vidas. Cuando en Cuba hablamos de futuro se sabe que hablamos de más justicia, de más libertad. Así que hasta la victoria siempre.


Nota: “El Socialismo y el hombre en Cuba:45 años después” se encuentra esperando por un productor que financie.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Por una entrevista cómo esta;en Miami te hubiesen incinerado-una parte del exilio cubano-,y en Cuba te hubiesen declarado mercenaria a sueldo del imperialismo.
Pero quién sabe,quizás ahora mismo,y yo qué no soy especialista del tema no lo puede saber,se está "moviendo "algo bajo tierra,y las posiciones radicales, de ambas partes,se estén...desradicalizandóses-existe esta palabra?-y puedas ser leída en ambas orillas
Es muy difícil comentar algo,sin haber visto el documental-ya sé que andas en busca de un sponsor-pero el proyecto en sí me suena muy interesante,y espero qué con tus genes,tengamos un "producto de calidad"
El Che,es un personaje controvertido,por eso hay que acercarse a su pensamiento con mucho cuidado..con cautela,porqué además,sabemos que es un ícono..y puede uno ser mal interpretado.
Personalmente ;la teoría del hombre nuevo,me parece una barrabazada de marca mayor.No diría un idealismo..me parece lo más cercano a teorías anárquistas...pero en fin,yo ni nadie tenemos la verdad absoluta.Siempre qué he escuchado cosas cómo:Hombre nuevo..Superioridad de razas..Socialismo del Siglo..Revolución Cultural",siempre que han sido esos términos..ya sabemos lo que ha venido detrás,por eso me presigno y le rzo a todos los santos del panteón yoruba!
Pero para eso están los documentales; cómo imagino que deba ser el tuyo.Y para eso están los foros...
Sí,el mar..ese mar qué siempre nos acompaña,y por el qué hemos visto marchar-nosotros,la generación guevarista-a miles de nuestros compatriotas.Fíjate,que hasta a la patrona de Cuba,la Virgen de la Caridad,cuenta la leyenda que la encontraron flotando en la Bahía de Nipe.Parece cómo una broma macabra del destino.!
Me alegra tú optimismo,y lo comparto,sólo qué habría qué contar con el optimismo de todos..
Nebur
PD:Otra cosa:Si todas la mujeres del "hombre nuevo" se parecen a tí,(me refiero a la foto)vale la pena decir:
Seremos cómo el Che!